Voy a copiar y pegar literalmente un post de un colega sobre esto que me ha parecido bastante bueno:
Una de las cosas que se dice es que las descargas generarón X millones de perdidas... Pero es que cuentan como perdidas todo contenido con copyright que alguien descargó, y eso es una gran falacia.Las leyes que intentan cerrar páginas de internet me recuerdan al movimiento Ludista que atacaba a las máquinas pensando que ese era el problema de su situación. En este momento creo que toda la industria del cine tal y como la conocemos va a transformarse de una manera radical. ¿Acaso sigue habiendo serenos por las calles para encender las farolas? Obviamente no porque el mundo ha cambiado y ahora hay electricidad. Con internet va a pasar tres cuartos de lo mismo. El formato CD prácticamente va a desaparecer y junto a él las empresas dedicadas a distribuirlo. Básicamente aquí, o te adaptas al cambio como empresas tipo Spotify, o no sobrevives. Y es que gracias a internet ahora no tenemos que soportar siempre a Bisbal en la tele porque directamente no la encendemos, nos metemos en la red y escuchamos lo que nos de la gana, no lo que nos dicen que tenemos que escuchar.
Es probable que una inmensa mayoría de las descargas no significaran una compra perdida, es simplemente gente que no iba a consumir sus productos. Esto es un matiz importante porque están contando como perdida algo que posiblemente les esté generando beneficios.
Quizá me falla la memoria, pero antes de que las descargas estuvieran tan extendidas no recuerdo que hubiera conciertos importantes en España todas las semanas; ni que las librerías estuvieran llenas; tampoco que se vendieran tantas películas o series en packs como ahora...
Internet ha hecho que la cultura se multiplique; todos somos un poco más gafapastas y por ende fetichistas. Los beneficios que generan los productos con copyright se han multiplicado, pero los cauces por los que estos llegan han cambiado; en muchos casos esas vías están eliminando a las grandes distribuidoras y a los productos basura. Les ponemos las cosas más difíciles para vender y para lucrarse de la labor de otros; exigimos mayor calidad y trabajo a un precio más competente.
El ejemplo claro lo tienen en mí: cuando se estrena una peli, sale un disco o emiten una serie en la tele muchas veces paso porque no se adapta a mis horarios o porque simplemente no tengo dinero. Pero si el producto es de calidad, lo consumo gratis y me ha gustado, en cuanto tengo dinero me compro una camiseta sobre ello, una edición coleccionista o acudo a un concierto, etc.
El problema es que internet acaba con ese modelo de negocio basado en el instante, en el consume ya o piérdelo, en el videoclip MTV que te meten hasta en la sopa. Esos productos, con los que con esfuerzo mínimo la industria cultural hacía millones ayá por los 90, se han ido en buena parte a la mierda (porque siguen dando dinero); pero ahora la gente no va tirar sus ahorros en ello.
Con internet el trabajo de calidad a la larga está mejor pagado: las películas antológicas siguen siendo vistas en el cine, recaudando y vendiendo luego millones durante muchísimos años en merchandising; compilaciones; ediciones especiales; reestrenos (mismamente el Rey Leon o Star Wars); etc. Lo mismo pasa con las buenas bandas, que se dan a conocer con mayor facilidad y se hacen más duraderas, llevándose la sorpresa con gente totalmente ajena a su generación en sus conciertos pidiendo los temas clásicos.También en la literatura se está mejor informado sobre lo que se lee, se compran libros porque oye, me ha gustado leerlo y te lo quiero regalar o porque merece la pena tenerlo en mi biblioteca, o algo más impensable, la gente empieza a mirar los comics como un producto de alta cultura. El cine independiente mueve más que antes; las pijillas escuchan grupos que en su puta vida hubieran escuchado y se van a festivales; Radiohead recauda millones con un disco que lanza gratis a pagar según lo que estimes oportuno....
En resumen, la "piratería" posiblemente este haciendo un gran favor a su industria, multiplicando su consumo en vez de condenarla. Hace un tiempo la CNN o la BBC (no recuerdo bien) ya mostró un estudio que exponía que la música esta más viva que nunca, que genera más pero que las discográficas ganan menos. Increíblemente son los artistas los que ahora se lucran. Es hora de que el mecenas cobre como lo que es. Que la gente que de verdad lo merece reciba ese mecenazgo; y la que no, que lo intente por sus propias vías, que internet les ofrece esa oportunidad.
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